21 de octubre de 2009

De espejo esta hecho el hombre

Por Orlando Tengri 


De espejo esta hecho el hombre,
de espejo que divide al separar dos mundos asíntonos,
y si no se es observador atento, uno creería iguales,
que error mas craso creer en esa creencia
porque el espejo es paradoja, es fetiche 
y es antojo de ver lo que uno quiere ver y nada mas.
Pero deseamos fundirnos con nuestra imagen reflejada,
ser uno solo, reflejo y verdad.
No pedimos otra cosa sino aceptación
y el espejo acepta lo que le ofrecemos,
nada rechaza
por eso es nuestra mejor alianza
porque al mirarnos en él vemos lo que no somos
y sin embargo quisiéramos ser.

Que oficio tan canalla el del espejo
que no puede ejercer su labor sin el otro,
que pobreza la del espejo que sólo es capaz de criticar.
Y sin embargo y de manera simultánea al empobrecernos, 
con su mirada, 
nos enriquece con lo que no somos y nos hace falta.
Así somos los hombres, espejos y espejeados.




FLUNK

20 de octubre de 2009

Eres jardín con estilo

Por Orlando Tengri.
Para Laura por ser jardín que crea memoria

Eres jardín con estilo donde entramos a jugar al futuro,
con nuestros afectos recorremos columpios y resbaladillas
gozando el paseo y la vuelta de un todo concentrado entre tus árboles, hierbas y areneros.

Como reducto de lo que fue te mantienes incólume ante el asfalto que devora,
ante nuestras pisadas viejas y arrosadas de pavimento y concreto,
porque tú no eres concreta sino movimiento, tierra, raíz que sube y baja.
 
Tú subversión es viento e instantes distintos,
así, cuando te creas huyes de lo creado
y lo que queda es memoria seca de hojarasca,
sonrisas y gritos de felicidad pasajera.

Ante la adversidad presentas a tus invitados
que contentos de ti, en ti, nos mofamos del exterior infortunio,
ya luego tendremos tiempo para ingresar a las verticales horizontalidades del espectro urbano,
hoy, jugamos a divertirnos, a estar bien, no mejor, sólo bien.

4 de octubre de 2009

El reino perdido

Por Orlando Tengri.
 

AVE RARA

Cuando yo era chaval mi madre tenía una prisión para aves de las que eufemísticamente llaman “jaulas”, de tiempo en tiempo a ella le gustaba guardar en calidad de prisioneras en dicho espacio a algún ave canora o de bello plumaje, por supuesto que no pasaba mucho tiempo antes de que acomedido me dedicara a abrirles las puertas propiciando la liberación de las criaturas aladas, motivo que me acarreaba interminables reprimendas por parte de mi progenitora, un buen día llegando a casa ví en la celda un ave rara de preciosos colores y no menos hermosos cantos y, de acuerdo a mis viejos hábitos libertarios le abrí la puerta para que saliera y viviera libre en la naturaleza donde pertenecía, de esta manera dejé escapar al pajarraco, cuando llegó mi madre a casa al ver la jaula sin inquilino exclamó “¡era el ave carísima que me había encargado la vecina mientras estaba de vacaciones!”, cabe decir que tuvimos que pagar el ave a la carcelera de al lado.

DE MORALEJAS

Querer ver a los animales con características humanas es algo añejo en el devenir de la humanidad, que el zorro sea astuto y el cuervo ladino, la gallina y la vaca tan abnegadas con respecto a su destino, por no hablar del inquietante burro o de los poliamorosos conejitos. Esopo y Lafontaine son ejemplos de esta cultura en que las narraciones contaban al final con una moraleja que debíase aplicar a los seres humanos, por medio de las fábulas en que los protagonistas eran animales dábanse intrucciones a las jóvenes generaciones sobre hábitos a seguir para mantener la seguridad de la comunidad por medio de la convivencia pacífica dentro de las convenciones establecidas por estas sociedades. Ahora todo ha cambiado, desde que nos consideramos únicamente como consumidores los animales han pasado a engrosar las largas listas de mercancías, ya sea como bienes ludófilos, herramientas y/o comestibles, el caso es que éstos ya no tienen el papel edificante de antiguas culturas, ahora son parte del hábitat de consumo del ser humano.

EPÍLOGO AL REINO PERDIDO DE LOS ANIMALES

Con excepción de algunos funcionarios públicos, dudo mucho que los animales se den cuenta que este 4 de octubre se festeja su día mundial, quizás alguno de ellos perciba la abundancia de croquetas vertidas en su plato por algún propietario acomedido de las celebraciones expiatorias de culpas pasadas y futuras, o tal vez en algún lugar las vacas se extrañen este día al dejar de ser manoseadas en sus tetas para extraerles pese a su mastitis el preciado líquido blancuzco. 

Considero que las criaturas con ánima llamadas animales tienen derechos impostergables, inalienables y demás palabras que si no se llevan a la práctica únicamente suenan como huecas rimbombancias, por ejemplo, los animales tienen el derecho de no ser comidos así como así en hamburguesa o en algún taco al pastor, también tienen derecho a no recibir hormonas para ser mas productivos entre otros múltiples derechos, a cada uno de nosotros corresponde el irlos descubriendo y ejerciendo. 

Existen personas a las que no les gusta coleccionar animales como mascotas ni se consideran sus propietarias, simplemente porque no creen en que tengan que estar bajo su tutela ni que éstos deban considerarse como pertenencias. Si bien los animales (fuera del reino de los burócratas antes mencionados) no tienen la consciencia del evento que celebramos este día, quizás puedan apreciar algún gesto cualquiera.

2 de octubre de 2009

2 de octubre 1968

Todos los años antes de aquel 2 de octubre tampoco se olvidan

Por Orlando Tengri

La vida también vive en la memoria, y las personas que dejaron de vivir aquel aciago segundo día de octubre de 1968 piden ser revividas por nuestra memoria histórica, necesitan porque necesitamos pensar en ellas por las cosas que hicieron cuando aún eran carne viva, corazón latiente y esperanza alada de sueños, pero también necesitamos revivir lo que les faltó por hacer ya que sus vidas fueron truncadas cuando lo mejor aún estaba por venir, porque cuando hay esperanza lo mejor siempre se hace acompañar de futuro. 

Que quedaran fijadas en nuestra memoria únicamente como víctimas sería congelarles en el tiempo su derecho a haber vivido, por ello pido honremos la memoria de los 16 años que transcurrieron antes de que aquella joven mujer llegara a aquella plaza a encontrarse con una bala, o los 57 años de aquel hombre que vivió su vida lo mejor que pudo y aunque no fue feliz la mayor parte de ella, lo intentó, por eso fue a la plaza de las tres culturas, para aportar su cuarta cultura, fruto de la construcción de toda una vida.

Piden se les recuerde no nada mas como víctimas, sino también como seres diversos que vivieron alegrías, penas, felicidades y sufrimientos, que amaron, fueron amadas y que tuvieron esperenza porque fue ésta la que les convocó aquel día en aquella plaza.